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Todos los jugadores tienen partidos buenos y malos. Pero también existen días donde todo te sale mal. Eso es lo que le pasó el último domingo a Francis Coquelin, en el choque entre Arsenal y Everton por la Premier League, donde una serie de hechos desafortunados no le permitieron terminar el encuentro.
En la primera mitad, los jugadores del Everton le rompieron la camiseta a punta de jalones. A la altura del pectoral derecho, Francis Coquelin tenía un pedazo de camiseta que le colgaba. Tuvo que salir del campo para ponerse una nueva.
| Francis Coquelin y su camiseta rota por los jalones. |
Durante el segundo tiempo, su compañero Olivier Giroud le cabeceó accidentalmente la nariz. Este fuerte impacto le provocó una pequeña hemorragia nasal que hizo que el partido se detuviera por lo menos cuatro minutos. Pero Coquelin insistió en seguir jugando, por lo que le colocaron algunos algodones y volvió al campo.
Y aunque parecía que ya había sufrido lo suficiente, a los 89’ recibiría un nuevo golpe que lo obligó a abandonar el campo. En su intento de despejar con la cabeza, el balón le volvió a pegar en la nariz. El impacto hizo que vuelen los algodones y regrese la hemorragia. Calum Chambers tuvo que entrar en su lugar. Será un partido difícil de olvidar para el jugador francés.
| Francis Coquelin tras el cabezazo que le propinó Olivier Giroud |
| Francis Coquelin recibió un pelotazo que lo sacó de la cancha. |
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